jueves, 28 de agosto de 2008

De la imaginación a los hechos!



Cuando llega el momento de tener la primera relación sexual, se tata de una experiencia inolvidable, que, indiscutiblemente marca a la persona. Es un momento que se recordara por años, del cual se podrá pensar con nostalgia, hablar o reír, pero siempre, de cualquier forma, la primera vez será recordada con cariño.


¿Qué son los métodos anticonceptivos?

Es cualquier forma de impedir la fecundación o concepción al mantener relaciones sexuales. También se llama contracepción o anticoncepción, y son una forma de control de la natalidad.Se pueden clasificar en 6 tipos: de barrera, hormonales, intrauterinos, naturales, permanentes y de emergencia. A continuación te presentamos una lista de los distinto métodos que existen hoy en día. Léelos con atención para que puedas determinar el tipo que más te conviene. Pon especial atención a las ventajas y desventajas de cada uno de ellos.

martes, 19 de agosto de 2008

¿TODAS LAS PERSONAS SON BISEXUALES?


El término bisexual se aplica vulgarmente a aquellas personas que tienen relaciones sexuales con los dos sexos. La bisexualidad es una elección. Se presta a mistificaciones porque no "encaja" con los estándares conocidos y más aceptados socialmente como la hetero, u homosexualidad.
Según algunos especialistas, la bisexualidad es vivida por todas las personas de acuerdo con sus necesidades, libertades e instintos. Esto permanece oculto en las experiencias de cada uno. Sólo algunas personas buscan un acercamiento a ambos sexos en algún momento de la vida sea por curiosidad o por otro motivo. El rol sexual recién se delinea y predomina durante la pubertad. Es en esta etapa de la vida que el ser humano define su objetivo, rol o comportamiento sexual en la adultez.
Cómo es un bisexual? No existe ningún rasgo físico, cultural o social que los distinga de los demás. Hay distintos factores responsables, culturales, sociológicos o biológicos. La bisexualidad no implica la renuncia al propio sexo, ni la negación del rol que posee como hombre o como mujer. Es un mecanismo psicológico en el que predomina la confusión y se entrelazan los sentimientos, el supuesto amor y la búsqueda de nuevas experiencias. Existen muchos casos de matrimonios, padres y madres de familia que, ante la necesidad de experimentar, se hacen adictos a la bisexualidad; aunque conservan este tipo de prácticas en el mas absoluto secreto. Generalmente, aquellos que tienen su familia formada, con hijos y una pareja a quien aman, no conciben que sus aventuras conformen el mundo de la infidelidad.

El punto G


Como seguramente ya sabes, el punto G femenino forma parte de tu anatomía y es un tejido que se encuentra en la pared frontal de la vagina, a aproximadamente cinco centímetros de su entrada.
Es sumamente sensible porque está rodeado de terminaciones nerviosas y la mejor manera de estimularlo es explorarlo y tocarlo, o tener una penetración por detrás durante el acto sexual.
Este enigmático y pequeño espacio de la anatomía femenina, se considera el foco de la máxima excitación en la mujer. Es una masa compuesta por nervios, situada a dos o tres pulgadas de la entrada de la vagina, y de forma parecida a un fríjol. Su tamaño es, aproximadamente, el de una moneda mediana, aunque su localización y dimensión, pueden variar entre una mujer y otra. Descubrir el Punto G, sin embargo, no es una tarea fácil, por lo que algunas mujeres llegan a creer que no lo poseen. Aquellas que sí lo han encontrado, dicen disfrutar mucho la posición de “perrito” durante el acto sexual, ya que le permite al pene del hombre, un mejor acceso a la pared del frente de la vagina, donde se encuentre dicho punto. Una presión firme, un ritmo rápido y mucha fricción, facilitarán el logro del orgasmo del Punto G. Es curioso cómo muchas mujeres, sienten una sensación parecida al deseo de orinar, cuando se comienza a estimular el punto, por lo que te recomendamos ir al baño antes de comenzar a hacer el amor. Es posible, además, que eyacules una pequeña cantidad de un líquido blanco o transparente, cuando llegues al clímax. Tal vez, a tu pareja y a ti, les cueste un poco de trabajo encontrar el “mágico Punto G” pero sin embargo, vale la pena, pues podrán adicionar placer, experiencia y nuevas sensaciones a la relación sexual. Así que, ¡inténtalo! ¡No pierdas la oportunidad de experimentar un nuevo tipo de orgasmo!